Poesía: Cosmoagonía

Por: Andrés Antón

Cosmoagonía

¿Qué sucedería
si después de tanto llanto
si después de tanta agua adormecida
debajo de mis párpados
aún resplandeciera
la blanca estrella
del ensueño
dentro de mis ojos cansados?

¿Seguiría rondando
el antiguo planeta
del amor
derramando sus influjos
sobre aquella vieja alma
que respira dentro de mi piel?

¿Seguiría la luna
blandiendo sus párpados pesados
como espectadora
del brevísimo teatro de mis días
en este vasto universo
en este vasto escenario?

¿Por qué mis palabras
si son tan vacías
cargan tantos ayeres muertos?

Extraño universo
cierra el telón de tu vista
ahoga tus ganas de verme rayando
como estela vagabunda
la cara de tu firmamento
yo no soy
el animal u objeto

que rueda el destino
por la pendiente del dolor.

¿Qué sucedería
-dímelo universo-
si mis manos desbaratan
la tela de araña
que ennegrece mi visión?

¿Será tu rostro de nada
lo primero que mire
y lo primero que sienta
como frías navajas
sobre mí?

Una atalaya de carne
y de huesos
que se desmorona
tan pronto sienta
la voz del viento.

Dímelo universo
que soy yo quien te escucha
bajo el velo oscuro del ayer
resistiendo como roble
las llamas del tiempo
que incendian mis ramajes
y mis frutas
reduciéndome a cenizas
convirtiéndome en polvo
que muy pronto alguna estrella
se ha de llevar.

El antiguo planeta del amor
gravita ahora sobre mí
dime universo
¿Puedes también tú escucharlo?
¿Puedes también tú adivinar
el aroma o el color
de sus sentimientos?
¿La delicada sábana de olores
que envuelve su finura?

¿Qué sucedería
si después de tanto llanto
si después de tanta agua adormecida
debajo de mis párpados
riera enloquecido
viendo latir entre mis manos
el palpitante corazón
de esta adormecida humanidad?

04/11/2015