Lucas Sánchez Gasparini - El dolor de la bestia. |
Lo he venido pensando
¡Claro que fue un error!
Un desacierto
Una total falta de respeto para conmigo
¡Me tocó untarme del fango cuando no quería!
Comer mierda como dicen por allí
Mojarme las botas del pantalón con aguas sucias.
Me cansé
Desde que di el primer aliento
Todo fue guerra fría con la vida
Una oscura cámara de gas
¡Lo detesto!
Sentir cómo fluye por mi cuerpo
El galope del caballo en mi interior
La fuerza que me impide guardar la calma suprema
El temblor que provoca la incapacidad
¡Claro que fue un error!
Un desacierto
Una total falta de respeto para conmigo
¡Me tocó untarme del fango cuando no quería!
Comer mierda como dicen por allí
Mojarme las botas del pantalón con aguas sucias.
Me cansé
Desde que di el primer aliento
Todo fue guerra fría con la vida
Una oscura cámara de gas
¡Lo detesto!
Sentir cómo fluye por mi cuerpo
El galope del caballo en mi interior
La fuerza que me impide guardar la calma suprema
El temblor que provoca la incapacidad
La ausencia de lo indispensable
La calamidad con nombres propios
Todo aquello que me consumió
Llenaron el pozo de lluvia ácida.
En mí escampó por completo
Para luego quedar en sequía
Con cielos grises por siempre
Me ha tocado andar
Lo confieso
Quiero en mí la túnica negra
El descenso anticipado
La obscura hazaña.
Lo he venido pensando
Claro que fue un error
Una falta de respeto para con mi opinión
Traerme a este mundo para que me despedazara por completo.
Claro que fue un error
Una falta de respeto para con mi opinión
Traerme a este mundo para que me despedazara por completo.
Un par de estrellas dejaron de brillar
Una constelación se volvió de espaldas
Una botella de añejo vino se quebró
Cuando nací el mundo lo sabía
No debía y no quería estar en él.
Es como silla de mimbre junto al fuego
Como bola de bolos en el agua
Como…
Ya estoy aquí
Quisiera escapar
No logro concretarlo
Algo me lo impide.
Camino sin tener dónde ir
Me detengo sin tener qué esperar
Y me lo pregunto tantas veces
¿Qué hago yo aquí?
La respuesta es un silencio mudo
La pregunta hace eco.
El día que mis piernas tiemblen
Mi barba sea como de cenizas
Mis ojos, ojos ajenos
Mi alma devuelta a su dueño
Y mi cuerpo alimento para otros
Ese día la libertad llenará la nada
Y sabré qué es el ser en mí
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